Aún conservo tu sabor
y tu hueco en la almohada
y en las sabanas tu olor
y en la retina el color
verde-azul de tu mirada
Amor con amor se paga
proclamaste con fervor
y tu boca recorrió
mi cuerpo con el ardor
de una pasión renovada
Fuiste sierva y fuiste dama
que juega con el amor
y sin señal de pudor
muestra el brillo del sudor
que va inundando la cama
¿Una noche inacabada?
Me entregué sin condición
me bastó con tu pasión
y es que a veces el corazón
consume su propia llama.
DELACH.-
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